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La voz de la justicia
nadie la puede matar
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Declaraci�n del Comit� Oscar Romero-SICSAL-Chile
sobre el reconocimiento del martirio del arzobispo Oscar
Arnulfo Romero.
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�La Congregaci�n para las Causas de los��Santos
ha publicado el reconocimiento oficial de la Iglesia
Cat�lica sobre el martirio de don Oscar Arnulfo Romero,
arzobispo de San Salvador.���Romero
fue asesinado por �odio a la fe� cuando celebraba misa
en el Hospitalito��de
la Divina Providencia en San Salvador.
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Se ha levantado as� la principal barrera
para su beatificaci�n, obstaculizada por los sectores
eclesi�sticos reaccionarios salvadore�os y de
estructuras superiores.
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Los autores materiales��del
martirio fueron los escuadrones de la muerte, fundados
por el mayor de ej�rcito Roberto D�Aubuisson, quien
hab�a sido adiestrado en la Escuela de las Am�ricas del
ej�rcito de Estados Unidos.
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Los poderes pol�tico, econ�mico y
militar fueron los autores intelectuales quienes, al
igual que un sector de la Iglesia Cat�lica, nunca se han
atrevido a reconocer la voz prof�tica de San Romero de
Am�rica, como es denominado por los campesinos,
ind�genas y luchadores sociales que s� lo han asumido
como aut�ntico profeta.��Su
palabra no ha��muerto
ni ha podido ser silenciada, porque a trav�s de Romero,
Dios �nos habla y nos ofrece un signo de su Reino�,
puesto que a trav�s de su testimonio de vida �el
disc�pulo se asemeja al maestro�.��(�Lumen
Gentium, N� 50).
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El Comit� Oscar Romero-SICSAL-Chile
manifiesta su benepl�cito ante la decisi�n del Papa
Francisco al haber superado los obst�culos de �quienes
absolutizan la riqueza� (Romero, 12-8-79).��El
reconocimiento de la santidad de Romero tambi�n
significa que la labor de difusi�n de su testimonio y de
la visi�n de Iglesia como Pueblo de Dios que �l
representa ha logrado superar �el invierno eclesial�.��Igualmente,
su vida condensa las vicisitudes de las Iglesias de
Am�rica Latina a trav�s de la aut�ntica fe �expresada en
obras de justicia� de miles de personas heroicas y el
testimonio de la gran cantidad de laicas y
laicos�martirizados por su compromiso con el Evangelio.
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Es por ello que en este momento de
alegr�a es v�lido invitar a seguir el ejemplo de Romero,
y participar de las pr�ximas celebraciones de su
testimonio estando atentos al dia y lugar de su
proclamaci�n como beato de la iglesia . Esta��invitaci�n
se extiende a todos los cristianos y personas de buena
voluntad, pero en forma especial a los obispos,
sacerdotes, religiosas y religiosos.��A
ellos, expl�citamente, les decimos que la fe emanada del
Evangelio no admite ambig�edades ni posturas
acomodaticias.��Tal
como Romero afirmara en su discurso en la Universidad de
Lovaina: �O creemos en un Dios de Vida o servimos a los
�dolos de la muerte�.
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Comit� Oscar Romero-SICSAL-Chile.
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Santiago de Chile, 12 de febrero de
2015.
M�s Informaci�n en www.soawlatina.org
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